La maravilla de la Revolución Ciudadana es incuestionable, espero que se queden por muchos años más, y que la psicopatía del imprescindible nos gobierne eternamente.
Se acercan las elecciones generales en Ecuador que serán en el 2017. Hace unos meses, aprobaron la reelección indefinida, lo que le da carta libre a nuestro ilustre presidente Rafael Correa de presentarse a futuras elecciones a partir del 2021. Lastimosamente la reforma no entra en estas elecciones (¡qué desalentadora noticia!).
Parte de mí siente una inmensa tristeza por esto, y me llevó a escribir las diez razones por las que votaría por Rafael Correa, junto con su partido Alianza País, en el 2017 y en cualquier futura elección.
1. Quiero que Papá Estado me cuide por siempre
No soy nadie sin el poder del Estado. Necesito que me proteja de cometer errores, y de que tome las decisiones por mí mismo. Odiaría volverme responsable de mis actos; es mejor que el Estado se ocupe de las situaciones que requieran esfuerzo y sacrificio. Yo quiero vivir del gran socialismo, y que este redistribuya la riqueza de aquellos que tienen más, por su trabajo, hacia mí, que soy un humilde servidor de la patria.
2. La democracia es para uno, no para todos
¿Qué es la democracia? Sumiéndonos tan solo en su etimología, es el poder de todos. El poder del pueblo para hacer que la Revolución Ciudadana perdure por siempre. Nadie puede dudar de la democracia efectiva en mi país, aquí todos son escuchados, hay una clara separación de poderes, y la Asamblea representa de manera efectiva a todos los ecuatorianos.
Sin duda alguna somos ejemplo de un verdadero país democrático. Hace poco se aprobó en el país la reelección indefinida en un proceso digno de admirar. No fue necesario realizar consulta popular, ni aunque cierta prensa corrupta expresa que más de la mitad de ecuatorianos pedían consulta popular: eso es falso.
3. Somos la última esperanza bolivariana en Latinoamérica
¡Algo terrible está pasando! ¡Las desastrosas oligarquías están utilizando técnicas engañosas para tomar el poder de nuestros países vecinos! Ya pasó en Argentina, recientemente en Venezuela, parece que este virus está a punto de contagiar a toda América Latina. Incluso la compañerita Rousseff está siendo objeto de calumnias y falsedades. ¡No debemos permitirlo! La espada de Bolívar seguirá rutilante en el Ecuador, el socialismo del siglo XXI es lo mejor que nos pudo haber pasado, y si no me creen, vengan a mi país, observen las facilidades de inversión que este posee, y las facilidades que existen para generar riqueza.
4. La oposición solo la hace la sombra del rey
No se por qué tanta gente habla de una oposición, si Rafael casi nunca falla, sus políticas incrementan muchísimo la economía de Ecuador, y solo las podría hacer mejor su propia sombra. Felizmente aquí no hay una verdadera oposición, en realidad es tonto pensar que deberíamos tener una. Cuando existieron conflictos acerca de algún proyecto, el Gobierno se acercó a quienes consideró apropiados para ello. Cierto es que no se pueden reunir con cualquiera, no hay que darles oportunidad a esos oligarcas que pretenden un golpe blando. Espero en mi país no ver la imagen que recientemente se dio en Argentina, cuando Macri, el presidente electo se reunió con su rival electoral, Daniel Scioli. ¡Qué abominable gesto!
5. Quién necesita inversión privada cuando tenemos a la economía solidaria
Muchos dicen que nuestro éxito se debió al boom petrolero que vivió el mundo hace unos años atrás. Claro está que eso es mentira, nuestro éxito radica en la eficiente aplicación de las políticas públicas. Es por eso que hoy en día no estamos endeudados, supimos ahorrar en el momento adecuado. Es por eso que China nos sigue prestando dinero, sin importar los altos intereses. Es por eso que no necesitamos abrirnos al mercado, ni darle confianza al empresario. Es por eso que no estamos en recesión económica, y es mentira que mucha gente esté perdiendo su trabajo o que no hayamos pagado el décimo tercer sueldo a los funcionarios públicos.
6. Estamos a punto de ser la sociedad modelo que ejemplificó el gran Orwell
Regresemos a 1984… Me refiero al libro, no al año. Casi como un profeta George Orwell visualizó lo que pronto podría ser mi gran patria. Tenemos a nuestro Gran Hermano, conocido acá como el compañerito Rafael, él todo lo ve, todo lo siente, nada le es oculto. A diario nos llenamos de sus propagandas en la televisión, conducimos y podemos ver en cada calle como “Avanzamos Patria”. Utilizar redes sociales se ha vuelto más fácil desde que el compañerito contrató a quienes la oligarquía imperialista llama “trolls”, ellos siempre están pendientes de que mis mensajes sean en alabanza a Rafaelito, de lo contrario me escriben para que no se me olvide. También, hemos mejorado nuestra seguridad, pronto los militares nos resguardarán en las calles, y se seguirá vigilando a quienes parezcan intentar un golpe blando. No deben olvidarlo compatriotas, Rafael nos está observando.
7. El pasado no volverá
No señores, ¡la larga noche neoliberal jamás regresará! Ese pasado ya es historia, ya no tenemos corrupción, ya no tenemos delitos que queden en la impunidad, ahora tenemos transparencia y la tranquilidad de que son hombres puros los que nos gobiernan. Si alguno de ellos se hace millonario de la noche a la mañana, es debido a su ardua labor y nada más. Y claro, lo más importante, ahora ya no se juega con la Constitución, ya no se juega con la democracia, este elemento es y será esencial en este gobierno; claro, siempre y cuando no alteren la continuidad de este gran “Revolución Ciudadana”.
8. Porque hay pan para Navidad
Es un hermoso mensaje el que nos trae Rafael Correa a través de este video. Llega a una casa sin ser invitado, trae un delicioso Pan de Pascua, y hace que la familia redistribuya la comida entre él y Jorge Glas, nuestro ilustre vicepresidente. De seguro ese pan es hecho por nuestros artesanos, puesto que siempre debemos consumir solo lo nacional. Ya empezarán los envidiosos a decir que el spot refleja lo que Correa le hizo a la economía del país, entró sin ser invitado, trajo consigo unas miseras políticas públicas, invitó a más personas a que se aprovechen de la fiesta, e hizo que las personas redistribuyeran sus riquezas. ¡No les crean a esa prensa corrupta! Ya mismo y empiezan a decir tonterías como #MiPavoEsParaMisHijos.
9. Quiero a mi Príncipe, como diría Maquiavelo
Necesito a alguien con la astucia de un zorro y con la fuerza de un león. Necesito a alguien que tenga las cualidades para permanecer en el poder, sin importa lo que pase. Necesito que mi gobernante sea un príncipe. ¡Y ya lo tengo! Rafael Correa representa todo lo que un país necesita para crecer económicamente, para desarrollar los cimientos de una verdadera democracia, para asegurar la continua gesta inacabada de su Gobierno, y para eliminar a cualquiera que sea una amenaza para este maravilloso proceso.
10. Libertad, ¿qué es eso?
Por último, un corto, pero especial apartado a la libertad. Aquí cada ecuatoriano es libre de hacer lo que quiera, siempre y cuando nos guste. Existe libertad de expresión, pero nunca digas nada que nos desagrade. ¡Sé libre, sé feliz! Y nunca olvides que esa felicidad también es mía, y que podré hacer lo que quiera con ella, sin que me cuestiones.